La Jueza Figueroa seguirá en su cargo por 5 años más
Con 36 votos afirmativos y 35 votos negativos, el Senado aprobó este jueves el pliego para que la jueza Ana María Figueroa pueda seguir integrando la Cámara Federal de Casación Penal en su cargo por cinco años. La votación terminó empatada y Claudia Ledesma Abdala tuvo que desempatar. También, se aprobaron los 32 pliegos restantes para completar el Poder Judicial y el Ministerio Público Fiscal.
A principio de septiembre, la camarista que debía fallar sobre la reapertura de la llamada Causa Hotesur-Los Sauces en la que se encuentra imputada la vicepresidenta Cristina Kirchner, fue desplazada por la Corte Suprema por haber cumplido los 75 años de edad.
Tras el aval de la Cámara Alta, la jueza cuenta la legitimidad para volver al despacho que ocupó hasta el mes pasado. En ese escenario inédito, por el fallo de la tribunal supremo, la Cámara de Casación puede realizar un informe con la novedad al Consejo de la Magistratura para que sea este órgano el que formalmente determine los pasos a seguir y habilite, o no, a Figueroa a continuar en el cargo.
Si el Consejo de la Magistratura decidiera hacer prevalecer la resolución de la Corte, Figueroa podría litigar en el fuero contencioso administrativo e incluso, para evitar demoras, plantear un per saltum para llegar directo al máximo tribunal.
Si el caso llegara a la Corte, deberían designarse conjueces porque la resolución del pasado 6 de septiembre que cesó a Figueroa en el cargo fue adoptada por unanimidad por los cuatro ministros que actualmente integran el máximo tribunal.
Jueza Ana María Figueroa: “No tuve ningún derecho de defensa”
Cuando se conoció el fallo de la Corte, la jueza Figueroa dio una entrevista en Radio 10 donde denunció que no tuvo “derecho a la defensa” y apuntó contra la doble vara del máximo tribunal.
“No tuve ningún derecho de defensa. Conmigo aplicaron una doble vara, y si me la aplican a mi, se la aplican a todo el mundo”, señaló Figueroa.
“Hay que muchos jueces cumplieron 75 años y les dieron el acuerdo para continuar en sus cargos. Siempre se resolvió así, hasta que se dio mí caso”, agregó la jueza.
“Confiaba en que me iban a dar el mismo trato que a mis otros colegas. Desde la Corte sacaron una resolución que no se entiende y ordenaron el cese automático de las funciones”, observó.
Por otra parte, analizó también que si hubiera sido “un hombre” no se “hubieran animado a hacerle lo que me hicieron a mí”. Por lo que finalizó con que la acción del Alto Tribunal “tiene una connotación tremenda de género”.
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